¡Hola a tod@s!
Llevo creo que son ya unos cuatro años con mi heladera en el armario de mi cocina, me la compré con toda la ilusión del mundo (bueno, en realidad no me la compré, me la regaló mi marido), con la intención de aprender a hacer los mejores helados habidos y por haber, pero lo que es el no tener idea de cómo hacer helados, requisitos indispensables, pautas, recetas, etc. hizo que después de varios intentos fallidos acabara como ya he dicho, olvidada en un armario. Desde entonces he de reconocer que era como una espinita clavada y por más que buscaba recetas de helados no las encontraba aptas para heladeras, o eso creía yo ^_^. Este año, gracias a dios y aprovechando el bomm que han tenido las heladeras del Lidl me he animado a desempolvar mi heladera y a probar recetas que los apasionados como yo han ido compartiendo por las redes sociales y para que como siempre no queden en el olvido y por supuesto, para que no os pase como a mi y tengáis vuestra heladera muerta de risa en casa, abro una nueva pestaña de recetas para heladera, espero que os guste ^_^.
Ahora os quiero contar unos truquis o unas pautas muy importantes a la hora de hacer helados que a mi me han servido para que los helados salgan bien, es decir, para que la heladera haga su función principal que es mantecar el helado y no termine con un batido en el vaso de mi heladera 😜:
- La mezcla que prepares (el mix) ha de estar muy frío, pero que muy frío antes de verterlo en tu heladera, para esto has de tenerlo un mínimo de 12 horas en la nevera, aunque lo ideal son 24 horas y así aprovechas para que haga un el proceso de maduración correcto. El proceso de maduración de la mezcla de los helados y sorbetes es muy importante, ya que permite obtener un helado mucho más cremoso y más estabilizado. Durante la maduración, la mezcla mejora sus propiedades, consiguiéndose que las proteínas de la leche se hidraten perfectamente y que los estabilizantes y emulsionantes tomen volumen hinchándose. Gracias a esto, los helados son mas untuosos, las materias grasas cristalizan y se realza el sabor del helado. En conjunto, la maduración permite obtener un helado de mayor calidad.
- Otra fase de suma importancia es la mantecación. Consiste en un ejercicio de agitación y enfriamiento simultáneos, la mezcla la introduciremos a un máximo de 4º. Para una heladera con compresor se verte la mezcla previamente enfriada y listo, mientras que para una heladera eléctrica (sin compresor) para que esto sea posible hay que guardar la cubeta en el congelador (siempre dentro de una bolsa de plástico para que no coja olores ni sabores) durante al menos 24 horas antes de comenzar con el proceso de mantecación. Si todo el proceso de elaboración ha sido correcto y en especial, el tiempo de maduración, entonces esta agua ligada retardará su congelación y los cristales de hielo serán diminutos. Si por el contrario, la mezcla no se ha equilibrado correctamente, entonces el agua que ha quedado libre comenzará a congelar a 0º, dando lugar a la aparición de grandes cristales de hielo, alterando negativamente la estructura del helado. La agitación consigue que, rascando las paredes de cada uno de sus giros, la mezcla la endurezca de forma uniforme, que los cristales de hielo sean repartidos y, sobre todo, que se produzca una justa y precisa incorporación de aire. Cuando el helado alcanza la temperatura de –10 o –11º, con alrededor de un 75% de agua congelada, el enfriamiento se detiene. El ciclo de mantecación ha concluido y hay que proceder a la extracción del helado. Para obtener una textura lisa y los cristales sean realmente diminutos, el ciclo de enfriamiento tiene que ser corto, no pudiendo prolongarse mas de doce minutos.
Espero que os haya servido de ayuda, mil besos a mis lectores. ^_^
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